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lunes, 5 de noviembre de 2012

Las pastas de azúcar.

Mucha gente me pregunta con qué se hacen las decoraciones de las tartas, todo eso que va encima, y yo siempre respondo: con pasta de azúcar. Básicamente para dar a entender que todo es comestible, que prácticamente es azúcar con algunas cosillas más.

Pero claro, creo que adoptamos el término "sugar paste" del país de Obama y se lo aplicamos a prácticamente todo, yo la primera, y no es correcto. En el universo de la decoración de tartas hay un sinfín de pastas, todas ligeramente distintas y todas con una aplicación diferente que hacen que podamos trabajar y obtener todo lo que deseamos conseguir con nuestras obras de arte. Por ejemplo:
- el fondant: para cubrir las tartas y darles ese acabado satinado.
- el fondant de miel: para decoraciones y cubrir tartas.
- la pasta de goma: para adornos pequeños y especialmente flores
- el pastillaje: para construcciones rígidas
- el glacé real: para flores, adornos pequeños, filigranas, encajes, terminaciones, etc.
- la falsa pasta de almendras: para adornos mayores y figuras en general.

Yo soy de la vieja escuela ( ya me estoy echando años encima, jaja ) y hasta el momento no he preparado nunca una tarta con alguna de estas pastas comprada. Yo las preparo todas en casa. No digo con esto que no existan buenas marcas y productos ya hechos pero a mi me enseñaron así y si bien es más trabajo, me gusta hacer todo.

He hecho mis pinitos en estos años y a veces es difícil dar con una pasta que te funcione bien, por las proporciones utilizadas o por algo tan sencillo como el clima y la humedad del ambiente. No hace mucho intenté hacer un sofá con fondant mezclado con CMC, que se supone que le da el punto para poder modelar. Mi sofá no secaba nunca, se torcía y se desmoronaba. Ay, qué sufrimiento! No vuelvo a experimentar: para el siguiente sofá pastillaje, falsa pasta de almendras y pasta de goma, dependiendo del diseño.

Hoy comparto la receta de la falsa pasta de almendras, que me ha dado unos resultado magníficos y que está especialmente dedicada a una compañera de aventuras de azúcar con un clima igual de húmedo que el mío. Toma nota que sé que te funcionará:
Ingredientes:
- 12 grs. de mantequilla
- 43 ml. de agua
- 25 grs. de harina común
- 1/2 cucharada de glucosa
- 1/8 cucharada de CMC
- 250 grs. de azúcar en polvo ( aproximado )
- esencia a gusto

1. Ponemos el agua y la mantequilla a hervir.
2. Añadimos la harina y cocinamos durante 2 minutos hasta que no queden grumos.
3. Retiramos del fuego y mezclamos con la glucosa. Este es el momento de añadir la esencia.
4. Tenemos el azúcar tamizado con el CMC y vamos incorporando de poco en poco. La pasta tiene que llegar a un punto que se trabaje bien y no se pegue a los dedos; si eso significa echar los 250 grs. de azúcar está bien, si es un poco menos, también.
5. Dejamos reposar al menos una noche, dentro de dos bolsas de plástico, en la nevera. Cuando no se trabaja, devolver a la nevera para que no fermente.

Un beso y a modelar.